Día 11: Estadísticas y foro
En el día de hoy han pasado cosas dignas de ser contadas, mencionadas o referidas en este diario personal y no me gustaría dejarme ninguna.
Bien, la mañana se ha iniciado con los chicos de refuerzo: los "linces" para mí desde su visita al aula de informática ayer. De esa hora de clase que he estado con ellos me gustaría destacar dos cosas: la posibilidad de aprovechar la lectura de un texto para comentar diferentes aspectos linguísticos (pinceladas de gramática) y la estrategia de introducir una actividad mediante una presentación atractiva. Ejemplo: Para explicar el diálogo indirecto es necesario partir de un diálogo directo. Lo que Bea ha hecho ha sido buscar un ejemplo de diálogo cercano a los chicos. Resultado: Un diálogo donde se planificaba un robo en una casa de Matadepera. Deberías haber visto la atención que han prestado todos ellos. ¡Qué bien pensado!
Durante la clase de 3ºB, que hoy ha trabajado el acento diacrítico, he oído frases que me han parecido acertadísimas y con mucha razón. Esto me demuestra, una vez más, que los profesores no entran sólo en clase para transmitir contenidos de su materia sino que también educan en valores o en ideas que, si bien no tienen que ser compartidas, al menos deben ser escuchadas.
- "No se debe ir con un pensamiento prefijado. Hay que vivir el presente!"
- "Lo que debéis hacer siempre es dar todo de vosotros mismos".
- "Todos podéis aprobar esta asignatura". (Me parece importante que la profesora insista en esta idea. Bea expresa continuamente el deseo de que todos aprueben y ofrece oportunidades para ello. Tan sólo hoy en un caso ha decidido dejar a un alumno a su suerte, pero lo ha hecho de una forma muy graciosa (de nuevo) citando las palabras de la madre del Lazarillo. El motivo de este comentario es el orgullo que demuestra el alumno por no hacer la tarea correspondiente.
Creo que el dictado es una de las actividades en la que encuentro más diferencias entre antes y ahora. Me explico: los dictados típicos eran los que no eran preparados previamente, sino que se hacían de un texto escogido por el profesor, a veces al azar; eran leídos tal cual; después se corregían, bien en la pizarra o por el profesor; y después se devolvían para que el alumno copiase diez veces cada falta de ortografía. Una opción más actual, más provechosa y más instructiva es la que he visto hoy. Los alumnos conocían cuál iba a ser el texto del dictado así que podían haber interiorizado algunos elementos. La profesora ha leído primero todo el texto. Después lo ha ido dictando haciendo indicaciones, invitando a la reflexión en aquellas partes más complicadas... Estas pistas considero que ayudan al alumno a pensar y a no centrarse en la memoria fotográfica que puedan tener del texto. A continuación, cada alumno se ha corregido su propio dictado y la profesora ha anotado el número de faltas de cada uno. Aquí han surgido los problemas: cómo cuantificar los errores. Solución: cada error, sea cual sea, se considera una falta.
La clase con los de 4ºA no se ha podido hacer porque han llegado de la excursión muy tarde y mentalizados en no hacer clase. Así es que allí hemos estado todos en una aula hasta que ha sonado el timbre. La nota divertida la ha puesto su tutor cuando, cansado de llevar con ellos toda la mañana en un archivo en Terrassa, ha "explotado" (ha sido así eh!) y ha llamado a una de sus alumnas: "la niña pija". La verdad es que no me esperaba una reacción así, pero lo mejor de todo es que ella ni se ha inmutado. Ha sido gracioso pero creo que un poco excesivo y de mal gusto. Pobre hombre!
No quiero acabar el diario de hoy sin hablar de la sesión de informática que he recibido entre clase y clase. He aprendido a instalar la opción de ver las estadísticas de mi blog y también a editar un foro. De momento éste ya existe, ahora falta darle forma. No tardaré mucho porque la semana que viene ya tengo la secuencia con los chicos.
Que no se preocupe todo aquél que desee ver sus estadísticas porque voy a hacer un tutorial para conseguirlo sin tardar mucho (como nos ha sucedido a nosotras). Estará colgado en una nueva sección que inauguraré hoy: "Tutoriales". No se me hubiera ocurrido a mí sola, pero creo que puede estar bien (ya tengo algunas ideas).
Y bueno, me gustaría acabar el día de hoy con una reflexión muy personal pero que me apetece compartirla con quien quiera escucharla. Me gusta estar rodeada por personas que saben más que ello, ya sea en conocimientos, en actitudes, en sensaciones..., por gente que me puede aportar algo. Ya dije el primer día que llegué al instituto como una esponja, a empaparme de todo, y creo que ésta es una parte muy importante de mi personalidad. Nunca me conformaría con lo que ya sé o con lo que ya he vivido, siempre voy a querer más. Afortunadamente, en estos 23 años de vida he tenido a mi alrededor a personas que me han enseñado MUCHO, aunque ellas no fueran conscientes, y soy consciente de que soy quien soy también gracias a ellas. Uno de los consejos que me dieron hace casi nueve años lo he tenido siempre muy presente y he intentado seguirlo. Por el momento no me ha fallado, no me puedo quejar de los resultados y siempre que tengo oportunidad lo aconsejo. Es breve, sencillo aparentemente, pero requiere un esfuerzo. Ese consejo es: SER CONSTANTE. Cuánto agradezco que me lo dieran en un momento crucial: cuando acabé 8ºde EGB. De verdad, creo que en esta vida hay que ser constantes para conseguir las metas que nos propongamos.
Bien, la mañana se ha iniciado con los chicos de refuerzo: los "linces" para mí desde su visita al aula de informática ayer. De esa hora de clase que he estado con ellos me gustaría destacar dos cosas: la posibilidad de aprovechar la lectura de un texto para comentar diferentes aspectos linguísticos (pinceladas de gramática) y la estrategia de introducir una actividad mediante una presentación atractiva. Ejemplo: Para explicar el diálogo indirecto es necesario partir de un diálogo directo. Lo que Bea ha hecho ha sido buscar un ejemplo de diálogo cercano a los chicos. Resultado: Un diálogo donde se planificaba un robo en una casa de Matadepera. Deberías haber visto la atención que han prestado todos ellos. ¡Qué bien pensado!
Durante la clase de 3ºB, que hoy ha trabajado el acento diacrítico, he oído frases que me han parecido acertadísimas y con mucha razón. Esto me demuestra, una vez más, que los profesores no entran sólo en clase para transmitir contenidos de su materia sino que también educan en valores o en ideas que, si bien no tienen que ser compartidas, al menos deben ser escuchadas.
- "No se debe ir con un pensamiento prefijado. Hay que vivir el presente!"
- "Lo que debéis hacer siempre es dar todo de vosotros mismos".
- "Todos podéis aprobar esta asignatura". (Me parece importante que la profesora insista en esta idea. Bea expresa continuamente el deseo de que todos aprueben y ofrece oportunidades para ello. Tan sólo hoy en un caso ha decidido dejar a un alumno a su suerte, pero lo ha hecho de una forma muy graciosa (de nuevo) citando las palabras de la madre del Lazarillo. El motivo de este comentario es el orgullo que demuestra el alumno por no hacer la tarea correspondiente.
Creo que el dictado es una de las actividades en la que encuentro más diferencias entre antes y ahora. Me explico: los dictados típicos eran los que no eran preparados previamente, sino que se hacían de un texto escogido por el profesor, a veces al azar; eran leídos tal cual; después se corregían, bien en la pizarra o por el profesor; y después se devolvían para que el alumno copiase diez veces cada falta de ortografía. Una opción más actual, más provechosa y más instructiva es la que he visto hoy. Los alumnos conocían cuál iba a ser el texto del dictado así que podían haber interiorizado algunos elementos. La profesora ha leído primero todo el texto. Después lo ha ido dictando haciendo indicaciones, invitando a la reflexión en aquellas partes más complicadas... Estas pistas considero que ayudan al alumno a pensar y a no centrarse en la memoria fotográfica que puedan tener del texto. A continuación, cada alumno se ha corregido su propio dictado y la profesora ha anotado el número de faltas de cada uno. Aquí han surgido los problemas: cómo cuantificar los errores. Solución: cada error, sea cual sea, se considera una falta.
La clase con los de 4ºA no se ha podido hacer porque han llegado de la excursión muy tarde y mentalizados en no hacer clase. Así es que allí hemos estado todos en una aula hasta que ha sonado el timbre. La nota divertida la ha puesto su tutor cuando, cansado de llevar con ellos toda la mañana en un archivo en Terrassa, ha "explotado" (ha sido así eh!) y ha llamado a una de sus alumnas: "la niña pija". La verdad es que no me esperaba una reacción así, pero lo mejor de todo es que ella ni se ha inmutado. Ha sido gracioso pero creo que un poco excesivo y de mal gusto. Pobre hombre!
No quiero acabar el diario de hoy sin hablar de la sesión de informática que he recibido entre clase y clase. He aprendido a instalar la opción de ver las estadísticas de mi blog y también a editar un foro. De momento éste ya existe, ahora falta darle forma. No tardaré mucho porque la semana que viene ya tengo la secuencia con los chicos.
Que no se preocupe todo aquél que desee ver sus estadísticas porque voy a hacer un tutorial para conseguirlo sin tardar mucho (como nos ha sucedido a nosotras). Estará colgado en una nueva sección que inauguraré hoy: "Tutoriales". No se me hubiera ocurrido a mí sola, pero creo que puede estar bien (ya tengo algunas ideas).
Y bueno, me gustaría acabar el día de hoy con una reflexión muy personal pero que me apetece compartirla con quien quiera escucharla. Me gusta estar rodeada por personas que saben más que ello, ya sea en conocimientos, en actitudes, en sensaciones..., por gente que me puede aportar algo. Ya dije el primer día que llegué al instituto como una esponja, a empaparme de todo, y creo que ésta es una parte muy importante de mi personalidad. Nunca me conformaría con lo que ya sé o con lo que ya he vivido, siempre voy a querer más. Afortunadamente, en estos 23 años de vida he tenido a mi alrededor a personas que me han enseñado MUCHO, aunque ellas no fueran conscientes, y soy consciente de que soy quien soy también gracias a ellas. Uno de los consejos que me dieron hace casi nueve años lo he tenido siempre muy presente y he intentado seguirlo. Por el momento no me ha fallado, no me puedo quejar de los resultados y siempre que tengo oportunidad lo aconsejo. Es breve, sencillo aparentemente, pero requiere un esfuerzo. Ese consejo es: SER CONSTANTE. Cuánto agradezco que me lo dieran en un momento crucial: cuando acabé 8ºde EGB. De verdad, creo que en esta vida hay que ser constantes para conseguir las metas que nos propongamos.
1 comentario
Bea -
Muy bien Sonia, vas muy bien y eres mi "orgullo" personal.